Sellado de ventanas
El sellado de ventanas es un aspecto importante del aislamiento del edificio que ayuda a prevenir corrientes de aire, humedad y ruido. Un sellado adecuado de las ventanas es esencial para la eficiencia energética de un edificio, ya que minimiza las pérdidas de calor y reduce los costos de calefacción y refrigeración. En edificios antiguos, donde los sellos suelen estar desgastados, su renovación puede mejorar significativamente el confort habitacional.
Tipos de sellados de ventanas:
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Perfiles de sellado: Sellos de goma flexibles insertados en los marcos para cerrar huecos entre hoja y marco. Disponibles en varias formas y tamaños.
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Sellos de espuma: Sellos de espuma autoadhesivos, fáciles de instalar y adecuados para huecos irregulares o marcos antiguos.
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Sellos de silicona: Utilizados para sellar juntas de ventanas; elásticos, resistentes a la intemperie y duraderos.
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Sellos termoplásticos: Fabricados con material termoplástico flexible y resistente, ofrecen excelente protección contra corrientes y humedad.
Importancia del sellado de ventanas:
Un sellado eficaz no solo mejora la eficiencia energética, sino que también previene la entrada de humedad, reduciendo el riesgo de moho y daños estructurales. Además, mejora el aislamiento acústico, algo beneficioso en zonas urbanas.
Prevención y mantenimiento:
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Inspección regular: Revisa las juntas de las ventanas periódicamente para comprobar que estén intactas, especialmente tras condiciones meteorológicas extremas o reformas.
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Renovación de sellos: Si los sellos están agrietados, frágiles o presentan filtraciones, es importante renovarlos para mantener su funcionalidad.
Información adicional:
Más información sobre materiales y métodos de sellado de ventanas puede encontrarse en sitios especializados y literatura de construcción y renovación.