Daños en la fachada
Los daños en la fachada suelen presentarse en edificios antiguos y pueden ser causados por diversos factores, como las condiciones climáticas, construcciones defectuosas o falta de mantenimiento. Estos daños no solo afectan la apariencia del edificio, sino que también pueden provocar problemas estructurales importantes que comprometen la seguridad y estabilidad.
Causas de los daños en la fachada:
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Influencias climáticas: La lluvia, nieve, heladas y radiación UV pueden deteriorar los materiales de la fachada con el tiempo, causando grietas, desprendimientos y eflorescencias.
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Humedad: La humedad penetrante es una de las principales causas. El agua puede entrar en grietas, congelarse y dañar el material o provocar moho.
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Falta o defecto de sellado: Un sellado insuficiente en ventanas, puertas y juntas permite la entrada de agua y daña la estructura.
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Errores de construcción: Fallos como juntas de dilatación insuficientes o elección incorrecta de materiales impiden que la fachada se adapte a movimientos o cambios de temperatura, causando grietas y deformaciones.
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Envejecimiento y desgaste: Con el tiempo, los materiales pierden su función protectora y la fachada se deteriora.
Tipos de daños en la fachada:
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Grietas: Causadas por tensiones térmicas, asentamientos o contracción del material.
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Desprendimientos: Ocurren cuando la humedad penetra y se expande con las heladas, provocando que capas del material se suelten.
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Eflorescencias: Depósitos blancos salinos en la superficie, formados por agua que arrastra sales disueltas a través del muro.
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Moho y algas: La humedad en la fachada favorece el crecimiento de moho o algas, especialmente en zonas húmedas o mal ventiladas.
Eliminación y prevención de daños en la fachada:
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Inspección regular: Las revisiones periódicas permiten detectar daños tempranamente y tomar medidas a tiempo.
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Reparación de grietas: Las pequeñas grietas pueden rellenarse con materiales especiales para evitar la entrada de humedad.
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Rehabilitación y pinturas protectoras: Los desprendimientos y eflorescencias pueden tratarse con métodos adecuados y pinturas que protejan la fachada.
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Mejor sellado: Un sellado correcto de juntas, ventanas y puertas evita la entrada de humedad y protege a largo plazo.
Información adicional:
Más información sobre daños en fachadas y su reparación está disponible en sitios especializados y literatura técnica de construcción y rehabilitación.